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La teología de Agustín: Guía introductoria a sus obras más importantes / The Theology of Augustine

        

Marco Barone

La teología de Agustín: Una Guía Introductoria a Sus Obras Más Importantes.
por Matthew Levering
Grand Rapids, MI: Baker Academic, 2013
224 páginas. Libro en papel

El objetivo de este libro es presentar la teología de Agustín de Hipona (354-430 d.C.) a través de la exposición de “siete obras fundamentales” (xii). Esta es una tarea ambiciosa por dos razones. Primero, Agustín es uno de los más grandes teólogos de toda la historia de la iglesia, y posiblemente el más grande teólogo de la iglesia antigua y medieval. Resumir la enseñanza de una mente tan grande nunca es fácil y tal resumen necesariamente dejará algo fuera. En segundo lugar, como dice el propio Levering, “Agustín escribió más de cien tratados, innumerables sermones y más de cinco millones de palabras en total” (xi). Uno puede perderse en sus obras o desanimarse, o uno puede no saber por dónde empezar su lectura. A pesar de estas dificultades significativas, creo que Levering tiene éxito en la tarea de su libro.

Levering piensa que hay una línea conceptual que conecta las obras Agustinianas elegidas como representativas de la teología de Agustín: “‘Nos has hecho para ti mismo, y nuestro corazón está inquieto hasta que descansa en ti’ [Confesiones 1.1.1]. Estamos hechos para amar al Dios Trino y para participar en su vida. Este es el mensaje de estas siete obras de Agustín” (190).

El libro de Levering comienza con Sobre la Doctrina Cristiana (capítulo 1), el “relato de Agustín sobre la interpretación bíblica y la predicación” (1). Este es “un manual de instrucción para la interpretación bíblica Cristiana, la educación y la predicación” (xiii). A través de este libro, Agustín establece las reglas para leer, interpretar y predicar la Escritura. Este es el fundamento de la teología. La Escritura, sin embargo, se divide en dos testamentos. ¿Cómo lidiar con ellos? La Respuesta de Agustín a Fausto, un maniqueo, es útil (capítulo 2). Levering selecciona ciertos libros de esta obra (4, 6, 9, 10, 12-19, 22 y 30-32) donde Agustín ofrece “una extraordinaria teología Cristiana del Antiguo Testamento” (19).

Las Homilías de Agustín sobre la Primera Epístola de Juan (capítulo 3) explican cuál debería ser la meta de nuestro conocimiento de las Escrituras: el amor de Dios y Su iglesia. Las Homilías seguramente tienen cosas buenas que decir también al Cristiano de hoy. En el contexto de la controversia Donatista, las Homilías nos enseñan a considerar el bien y la paz de la congregación y el bienestar espiritual de nuestros hermanos creyentes como más importantes que nuestras propias ambiciones y preocupaciones personales. Sin embargo, este amor es sólo posible porque Dios nos amó primero. Levering pasa luego Sobre la Predestinación de los Santos (capítulo 4). Es la gracia electiva de Dios en Jesucristo la que, a través del Espíritu Santo, obra nuestra fe, conversión y preservación. Agustín experimentó esta dependencia absoluta de la gracia de Dios. A continuación, Levering examina las Confesiones de Agustín (capítulo 5), un libro que todo Cristiano debe leer. Es el relato sobresaliente que Agustín hace de su propia vida, una vida descrita en el contexto de la maravillosa gracia soberana de Dios.

Mientras que las Confesiones relatan la gracia y la providencia de Dios en la vida de Agustín, Ciudad de Dios (capítulo 6) es el relato de la gracia y la providencia de Dios en la historia humana. A través de su comprensión Cristiana de la historia, el teólogo Africano ofrece un hermoso relato de la historia como guiada providencialmente por nuestro Dios soberano para el bien de la “ciudad de Dios” (la iglesia) en oposición a la “ciudad de Satanás”. Esta historia culmina en la finalización escatológica del Sabbath eterno. En ese día final, estaremos en gloria, sirviendo a Dios y contemplándolo a través del rostro de Jesucristo. Sobre la Trinidad (capítulo 7) es una hermosa defensa de la unidad y de las tres Personas de la Deidad, con un enfoque particular en la unidad de las tres Personas. Tener comunión para siempre con el Dios vivo es el fin último del Cristiano y es por eso que la última obra Agustiniana tratada por Levering es Sobre la Trinidad.

Tengo algunas observaciones a modo de evaluación. En relación con las Homilías, Levering dice que “Agustín buscó un diálogo con los Donatistas, pero también los criticó polémicamente. Él es, por tanto, un progenitor, algo improbable de la teología ecuménica contemporánea” (189). Levering quiere enfatizar esto porque, lamentablemente, es miembro del grupo comprometedor Evangelical and Roman Catholics Together (aún más desafortunadamente, está del lado Católico Romano). Sin embargo, Levering debe ser más cuidadoso. De hecho, Agustín no tiene nada que ver con el movimiento ecuménico contemporáneo. Agustín nunca habría sacrificado la verdad de Dios en el altar de la unidad externa como lo hace el movimiento ecuménico moderno. Además, Levering dice con razón que “Sobre la Predestinación de los Santos demuestra que [es decir, la predestinación] es una doctrina bíblica” (189). Si esto es cierto, uno se pregunta por qué Levering sigue siendo miembro de la Iglesia Católica Romana, una iglesia que está en enemistad contra esta doctrina. Además, Levering se pregunta por qué, “si todo depende del amor infinito de Dios, Dios no transforma y salva a todos” (87), y agrega que “aunque este misterio no puede ser sondeado, no debemos sugerir que el amor superabundante de Dios carezca o sea deficiente con respecto a cualquier criatura racional” (87). Esta última afirmación no refleja la teología bíblica de la gracia particular de Agustín que está claramente expuesta en sus obras contra los Pelagianos y los Semi-Pelagianos, incluyendo en su obra Sobre la Predestinación de los Santos. Levering estropeó el final de un buen capítulo, aunque el resumen en sí está bien escrito.

La Teología de Agustín es un libro interesante y útil tanto para los creyentes como para los que se dedican al oficio. En primer lugar, la exposición es clara, una característica que hace que el libro sea adecuado para todo tipo de lectores que estén interesados en Agustín. En segundo lugar, Levering trata los textos con precisión y equidad. Podemos leer a Agustín hablando a través de los capítulos de Levering. De hecho, sus intromisiones son muy raras y fácilmente reconocibles por el lector exigente. En tercer lugar, su selección de las obras Agustinianas es juiciosa. A través del conocimiento de estas siete obras, realmente podemos conocer y apreciar a Agustín en sus mejores momentos (y, a veces, en sus peores momentos). Levering proporciona una buena introducción que es a la vez un punto de partida accesible para el principiante y un repaso para aquellos que ya están familiarizados con Agustín. Como introducción, pretende orientar al lector hacia las propias obras de Agustín. Para la teología Cristiana, especialmente la teología Reformada, Agustín es muy importante. El creyente Reformado se beneficiaría de tener una comprensión general de su teología. La Teología de Agustín puede ayudar en este digno esfuerzo.

Para más información en Español, por favor haz clic aquí.

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